MARISTAK ZALLA habilita un espacio para crear un aula de formación y emprendizaje dirigida a todos los emprendedores o posibles emprendedores de ENKARTERRIALDE, con una capacidad para 30 personas, gracias a la financiación de la Viceconsejería de Formación Profesional.
Se trata de un espacio polivalente: un espacio para trabajar, crear, formar y formarse, conocer y reunirse con otros profesionales… Una estancia diáfana con la posibilidad de crear diferentes zonas de trabajo según las necesidades: zona de creación y desarrollo, zona de presentación de proyectos, zona de investigación y zona para interactuar con máquinas de café y más comodidades que animen e inciten a la creatividad.
Para ello, se ha equipado una planta con mobiliario polivalente que permite hacer diferentes agrupamientos con los usuarios (trabajo individual, trabajo cooperativo) con las diferentes distribuciones y configuraciones en el aula, dotada con sofás y pufs, para crear una zona tranquila y diferente al modelo tradicional de las aulas, que fomente la creación y desarrollo de nuevas ideas y proyectos.
Todo debidamente equipado con conexión a internet, ordenadores portátiles con varios softwares instalados, una pantalla táctil para exponer proyectos y presentaciones, una pizarra digital...
¿Pero, qué es el EMPRENDIZAJE? Es el acto de ser emprendedor. Un emprendedor es una persona con una marcada determinación a enfrentarse a situaciones que conllevan un riesgo. En el ámbito laboral, la palabra emprender significa aprovechar una oportunidad de negocio y organizar los recursos necesarios para llevarla a cabo.
¿Pero, para qué un aula de emprendimiento? Estas se constituyen como una estrategia para potenciar, entre el alumnado, las competencias profesionales y personales e impulsar las habilidades emprendedoras (imprescindibles en el nuevo marco socioeconómico hacia el que se dirige nuestra economía).
El emprendimiento es el proceso de diseñar, lanzar y administrar un nuevo negocio, que generalmente comienza como una pequeña empresa o una emergente, ofreciendo a la venta un producto, servicio o proceso.
¿Pero, y en el ámbito escolar?
Fomentar el emprendimiento en niños, niñas y jóvenes es importante para promover su autonomía y superación en la vida. La manera en que se desempeñan en el aula es primordial para fomentar una actitud emprendedora. Los beneficios de esta práctica son múltiples: se desarrolla la responsabilidad, la autoestima, la autoconfianza, la superación y el pensamiento positivo, la pasión, la creatividad…
